Dexter, el oscuro pasajero; Jeff Lindsay

Título: Dexter, el oscuro pasajero.
Autor: Jeff Lindsay.

Lo primero que os voy a decir, si aún no conocéis a Dexter, es que el protagonista de El oscuro pasajero es un tipo muy normal. Trabaja para el departamento de Policía de Miami, es el analista de sangre de homicidios. Bien, una novela policíaca normal, ¿no?

Podría serlo. El malo hace de las suyas, el bueno consigue atraparle y fin de la historia. Pero... tal vez Dexter no es el tipo normal que aparenta ser, tal vez algo se esconde detrás de su perfecta máscara. Una sonrisa, unos donuts, una hermana policía, un padre adoptivo policía, una novia y... un amigo que reside en su interior. Una voz que le susurra lentamente desde dentro.

Dexter tampoco desea ser normal. No desea nada, no tiene sentimientos, él mismo cree que no tiene alma. Lo que sí que tiene es un Código, el legado de Harry, su padre adoptivo. Cuando Harry se da cuenta de que Dexter esconde un profundo y aterrador secreto se da cuenta de que solo hay dos posibilidades: intentar arreglarlo internándole en un psiquiátrico o... entrenarle, educarle y hacer que utilice su maldición como un don.

El auténtico ángel de la muerte. Un Código que permite dar rienda suelta al Oscuro Pasajero dentro de unos parámetros: siempre asegurarse de que la víctima es culpable de atrocidades, nunca dejar pistas, ser limpio, cuidadoso y hacer ver a los que van a morir el motivo por el que han llegado a la "mesa de operaciones" de Dexter.

Porque el protagonista es en realidad un asesino en serie, un asesino de asesinos. Limpia Miami de aquellos que la policía no puede encerrar. La historia comienza cuando Dexter lleva a cabo uno de sus trabajos "extraoficiales". Le rodea de las fotos de los niños que asesinó, le hace confesar su culpabilidad y después le hace desaparecer.

No podemos evitar sentir cierta simpatía por él pese a ser un asesino. Al fin y al cabo... solo acaba con los malos, ¿verdad?

En medio de su cotidiana y sosa vida un caso policial despierta algo intenso en su vocecita interior. Un caso en el que no hay nunca una sola gota de sangre, pulcritud y limpieza en los cadáveres encontrados. Los crímenes perfectos, sobre todo teniendo en cuenta lo mal que trabaja la inspectora LaGuerta.

Pero Deborah, la hermana adoptiva de Dexter, sueña con trabajar en Homicidios y abandonar Antivicio y su traje de prostituta de incógnito. Se mete de lleno en el caso. Suplica ayuda a su hermano, él siempre tuvo un instinto nato para los asesinos... ¿por qué será?

Encuentran a las prostitutas cortadas en trozos y desangradas... además de congeladas. Envueltas perfectamente en paquetes individuales. Dexter cada vez siente más interes por ese asesino tan parecido a sí mismo... tan parecido que podría ser él. Pero... ¿y si fuera él mismo? ¿y si el Oscuro pasajero decidiera salir cuando el duerme? ¿se puede matar en medio de una noche de sonambulismo? Dexter comienza a dudar.

 

¿Consigue Dexter atrapar al asesino? ¿Lo logra la policía? ¿Se deja Dexter a sí mismo pistas? ¿De dónde sale esa Barbie descuartizada? ¿Pueden dos Oscuros pasajeros conectarse de una forma poco razonable y algo parapsicológica? ¿Es todo producto de la mente de alguien que definitivamente ha perdido la cabeza? No voy a contaros más detalles, pero creedme... una vez que leáis los pensamientos de Dexter, que es el narrador además de ser el protagonista, no podréis parar hasta saber qué pasa al final.

SECUELAS

Dexter es una saga, pero no os preocupéis este libro tiene inicio y fin, no te deja a la mitad ni tienes que comprarte la colección para descubrir quién es el asesino de prostitutas de Miami. Yo sé que terminaré leyendo todos los libros, pero claro... yo ya era fan de Dexter antes incluso de leerlos.

ADAPTACIÓN TELEVISIVA

Lo que verdaderamente catapultó a este personaje a la fama fue la serie de televisión homónima, Dexter, que este año culmina con su última temporada. Desde el principio me pareció un personaje interesante, pero además el actor que han escogido lo hace increíblemente bien. Tal vez se pasa de humano en comparación con el libro, pero al fin y al cabo es su fachada.

Si no os atrae demasiado el libro o queréis un empujoncito más siempre podéis echar un vistazo a la serie.

 

 

 Utopía Crítica.